Demanda de ejecución de sentencia ¿Qué es?

Todo proceso judicial da lugar a una sentencia. En ella se especifica cómo una de las partes debe compensar a la otra. Sin embargo, hay veces en las que el beneficiario no recibe lo que le corresponde en el plazo indicado. Es en esos casos cuando puede interponer una demanda de ejecución de sentencia. Lo recomendable es acudir a un abogado de familia  y en cualquier caso aquí queremos hablar en profundidad acerca de este instrumento jurídico tan útil en este tipo de situaciones.

Pero ¿qué es una demanda de ejecución de sentencia?

Para definirla debemos recurrir a la Ley de Enjuiciamiento Criminal (Ley 1/2000, de 7 de enero) y, en concreto, a su artículo 549. En él se especifica que la demanda de ejecución de sentencia es la herramienta jurídica mediante la cual el beneficiario de una sentencia puede lograr que se haga efectiva. Para interponerla, es necesario que cuente con la asistencia de un abogado y de un procurador y que la dirija al juzgado que resulte competente en el proceso.

Conviene recordar que las sentencias firmes habilitan la vía ejecutoria con el propósito de defender los intereses de sus beneficiarios. Una vez presentada la demanda de ejecución, el demandado tiene la posibilidad de presentar oposición en el plazo de 10 días hábiles. También tiene la posibilidad de cumplir con lo dicho en la sentencia, en cuyo caso el proceso finalizará automáticamente. En el supuesto de que no haga ni lo uno ni lo otro, dará comienzo el proceso de ejecución forzosa.

¿Cuál es el contenido de la demanda de ejecución de sentencia?

Evidentemente, este tipo de demanda debe contener toda la información necesaria para ser admitida. Para encontrar cuáles son esos datos debemos recurrir de nuevo a la Ley de Enjuiciamiento Criminal, que dice lo siguiente:

• Establecimiento del tribunal en el que se debe presentar. En el artículo 542 de dicha ley se especifica claramente que todas las demandas que tienen como objetivo la ejecución de sentencia deben presentarse en el Juzgado de Primera Instancia que conoció el asunto siempre que hagan alusión a resoluciones aprobadas y acuerdos judiciales.
• Identificación de las partes. Tanto del litigado como del litigante. En caso de ser posible, el escrito de ejecución de sentencia ha de contener medidas para la investigación del patrimonio embargable y para su correspondiente localización.
• Fundamento jurídico de la demanda. Se encuentra en la propia Ley de Enjuiciamiento Criminal. El abogado responsable de llevar el caso se ocupará de redactarlo.
• Determinación de la tutela. En este apartado han de aparecer las cantidades reclamadas. En caso de que se trate de una obligación no dineraria, debe especificarse qué tiene o no que hacer al respecto.

Por su parte, en base al artículo 549 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, si la demanda hace referencia a una sentencia firme de un tribunal competente o a la resolución de un secretario judicial, el escrito solo deberá identificarla. Esto simplifica ostensiblemente el procedimiento.

Tipos de ejecución de sentencia

Dentro de la fase de ejecución, existen dos tipos diferentes. La primera de ellas es la económica o dineraria. En este sentido, el demandado deberá abonar al demandante el capital, los gastos administrativos derivados y los intereses por mora. Si no tiene capacidad de hacerlo en metálico, el juez autorizará el embargo de sus bienes. Conviene recordar que existen bienes que no son embargables, como es el caso del Salario Mínimo Interprofesional.

El otro supuesto hace referencia a la ejecución no dineraria. Hablamos de aquellos casos en los que la sentencia no obliga al pago de una cantidad, sino a la entrega de un bien, a la liquidación de determinados daños y perjuicios o a la obligación de hacer o no hacer algo (readmitir a un empleado, por ejemplo).
Este último punto es más complejo ya que puede hacer referencia también al área del Derecho Penal. En este caso, el juez puede determinar el pago de la multa establecida por normativa, prisión por el tiempo determinado según el tipo de delito o libertad condicional según los requisitos legales.

¿Cuánto tarda en hacerse efectiva una ejecución de sentencia?

Partamos de la base de que, una vez que una sentencia es firme, el demandado tiene 20 días para proceder a su cumplimiento. En caso de no hacerlo, el demandante tiene la posibilidad de dar inicio a la vía ejecutoria para que se haga efectiva. A partir de ahí, los plazos pueden variar bastante ya que depende de la capacidad del juzgado para procesar la demanda. Este es el motivo por el que se suelen incluir los intereses por mora.

En definitiva, la demanda de ejecución de sentencia es una herramienta muy útil cuando el demandado no recibe los beneficios derivados de una sentencia firme. Algo bastante más habitual de lo que parece dentro del ámbito civil y que requiere siempre de la intervención de un abogado especializado y de un procurador. Esperamos haber aclarado todas sus dudas al respecto.